viernes, 8 de noviembre de 2013

Decorar con Relojes

El reloj ha sido uno de los inventos más importantes de la historia de la humanidad, ya que ellos nos han servido para organizar todo nuestro mundo, desde el momento de su invención.

No obstante, hoy en día, están perdiendo la batalla con los teléfonos móviles, ya que cada vez más gente prescinde de su reloj y mira la hora en su Smartphone. Este hecho, está haciendo que el reloj esté ganando más importancia en el campo de la decoración  de paredes, que en el funcional.

El primer paso a la hora de elegir nuestro reloj decorativo, será su estilo. Podemos encontrar gran variedad de estilos en los relojes decorativos: relojes vintage, de propaganda de alguna marca comercial, moderno, clásico, industrial, de cuco, etc. Deberemos elegir un reloj que se adapte al resto de la decoración de nuestra sala.

Muy relacionado con el estilo, es la decoración interna de nuestro reloj, es decir, puedo elegir entre números romanos y números decimales; si quiero que tenga un dibujo de una rosa o de un macetero de lavanda; una botella de aceite o una de vino; y así un sinfín de posibilidades. Su elección, debe combinar con el estilo de decoración de nuestra sala.
Otro factor muy importante a la hora de la elección, es el color, que debe de ser acorde al color de nuestros muebles, para que no desentone. Que nuestros muebles son blanco, un reloj blanco, son oscuros, un reloj negro…

Algunos decoradores, se atreven con los contrastes, es decir, si nuestros muebles y decoración es de colores oscuros, poner un reloj blanco quedará rompedor y original. Una pieza perfecta para destacar en nuestra estancia.


Y, ¿por qué no darle un punto de color? hay infinidad de posibilidades para decorar con relojes. Son piezas clave en la decoración ya que reúnen los dos pilares fundamentales que en Muideco consideramos indispensables: decoración y funcionalidad. 

Por último, y no por ello menos importante, también podemos encontrar diferentes materiales en la fabricación de los relojes: madera, metal o plástico son los más comunes.

Asegúrate de no poner un reloj de madera en una zona húmeda o en el exterior, o uno de plástico en una zona en la que de mucho el sol.


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